El primer implante de marcapaso inalámbrico en Santander, se realizó en el Hospital Universitario Los Comuneros
El marcapasos podría definirse como un dispositivo electrónico cuya utilidad es hacer latir el corazón a base de descargas eléctricas que sustituyen al propio sistema de conducción cardíaca y garantizan un latido sincrónico y eficiente.
En 1930, el cardiólogo neoyorquino, Albert Hyman, desarrolló un marcapasos artificial que se basaba en provocar estímulos mediante pinchazos de aguja. El dispositivo tenía un generador de corriente continua conectado a un interruptor y se estimulaba al corazón con los pinchazos a través del tórax, este aparato pesaba más de siete kilos.
En 1958 el marcapasos que contenía un generador de impulsos y electrodos externos de gran tamaño, los primeros marcapasos implantables utilizaban como fuente de poder pilas de zinc–mercurio y funcionaban en promedio 2 años, actualmente los fabricantes han desarrollado fuentes de poder más durables, la más empleada es la de yodo–litio que tiene longevidades de entre 6 a 10 años.
El implante de dispositivos ha evolucionado en su tecnología y técnica de implante, los dispositivos en sí, son cada vez más pequeños y ligeros; el primer generador de impulsos, era una especie de disco de unos 15 cm de diámetro. En 1981 el marcapaso pesaba 55 gr. En 1995 el peso del marcapaso era de 14 g, en el 2013 marcapaso trans catéter, el peso bajo a 2 gr y el volumen de 1 cc y se insertan por medio de un tubo, llamado catéter, a través de una pequeña incisión en la pierna y dirigirlo hasta el corazón. La operación será menos invasiva y complicada. Este dispositivo no requiere el uso de cables que conecten el marcapasos con el corazón: el Micra TPS manda impulsos eléctricos a través de un electrodo que está colocado en el propio dispositivo. A pesar de su pequeño tamaño y su peso inferior a 2 gramos, el Micra TPS incorpora una batería con una duración estimada de 10 años. Además, el dispositivo es compatible con la realización de pruebas de resonancia magnética de cualquier parte del cuerpo. En contraste con el procedimiento actual de implante del marcapasos, el Micra no requiere de incisiones quirúrgicas en el pecho ni la creación de ningún “bolsillo” debajo de la piel. Esta novedad elimina las posibles complicaciones derivadas del implante y elimina cualquier signo visible del dispositivo. El implante de este tipo de marcapaso actualmente es para pacientes que no tienen acceso venoso y para pacientes con infección de bolsillo de marcapaso.
El 11 de noviembre, en el Hospital Universitario Los Comuneros, se implantó el primer marcapaso inalámbrico transcateter en Santander a un paciente de 78 años de edad con historia de bloqueo AV completo quien tenía implantados ya 4 marcapasos con un electrodo abandonado en subclavia izquierda y el último marcapaso disfuncionando por falla de captura del electrodo ventricular por fractura del electrodo, se realizó venografía derecha e izquierda para corroborar permeabilidad de la vena subclavia derecha e izquierda pero se encontraban ocluidas totalmente que imposibilitaba el implante de marcapaso por vía venosa, motivo por el cual se implantó el marcapaso inalámbrico transcateter micra a través de un catéter por la vena femoral derecha donde se alojó el marcapaso en el septum interventricular del corazón.
Dra. Ana Lucía Carvajal Paz
Electrofisióloga en Idime S.A.